el viento azotando las hojas,
la verde hoja moviéndose ajena.
Las gotas alcanzando la flor,
las flores brillando al sol,
el Sol resplandeciendo vivo.
Yo, torre, hacia todo mirando,
al aire, al sol, al viento, a las hojas,
a la lluvia, a la flor, más allá.
Impasible, sin verme,
defensora de mi rastro,
mi sombra. Otros mi ser.
¡Quien fuera torre, torreón!
Antes piedra y barro,
luego polvo y nada,